Conversatorio EPJA: Desafíos y experiencias para combatir el abandono escolar de jóvenes y adultos

Con gran éxito se desarrolló este martes el conversatorio “Compartiendo Prácticas de Formación y Aprendizajes para el Desarrollo Profesional en la Educación de Personas Jóvenes y Adultos”, realizado por Saberes Docentes, Centro de Estudios de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad de Chile, y en el que participaron coordinadores del Ministerio de Educación, miembros del Centro y participantes del proceso formativo.

Los panelistas de este encuentro, Lina Méndez, encargada de Convivencia Escolar y coordinadora SAT del Centro de Educación Integrada de Adultos (CEIA) Juanita Zúñiga Fuentes de Parral, y José Ramos, director del Liceo de Adultos José Manuel Balmaceda Fernández de Concepción, enfatizaron sobre las transformaciones y desafíos tras participar en los procesos de formación y acompañamiento de los proyectos llevados a cabo por el Centro Saberes Docentes.

Respecto de la iniciativa sobre el Sistema de Alerta Temprana del Abandono Escolar (SAT), Lina Méndez sostuvo que “tuvimos un cambio radical de mirada sobre la profundización de conocimientos de los factores extraescolares e intraescolares.  Para hacer este trabajo tuvimos que estudiar, priorizar factores más relevantes y empezar a sistematizar la información para acelerar los procesos en la detección de riesgo”.

Por su parte, el director del Liceo de Adultos, relevó que “la pandemia nos afectó la forma de cómo hacer las clases y eso implicó que tuvimos que actuar rápidamente para que nuestros estudiantes no se vayan y mantenerlos vinculados a la comunidad. Empezamos a implementar muchas acciones, haciendo un catastro de conectividad para ver quiénes se podían conectar a clases y los que no se podían conectar, les entregamos guías impresas, llamados por teléfono, visitas a domicilio, entre otros”.

En ese sentido, “el resultado de estas prácticas llevó a que bajáramos la tasa de deserción: el año 2019 tuvimos un 28% y el año 2020 sólo un 5%. Si bien la tasa de reprobación fue alta, muchos de los que reprobaron están con nosotros ahora, por lo que valoramos los esfuerzos que hizo la comunidad con ellos y eso es muy importante de mencionarlo”, acotó José Ramos.

En cuanto a la situación de la EPJA en Chile, Verónica Vergara, de la Coordinación Nacional de Educación para Personas Jóvenes y Adultas del Mineduc, expuso que la matrícula en modalidad regular a marzo de 2021, era de un total de 102.103 personas: de ellos, 7.027 pertenecen a pueblos originarios, 5.824 son extranjeros y al menos unos 260 son estudiantes mayores de 71 años.

“Los temas de prevención del abandono escolar tienen que ver con temas de inclusión, nosotros, como modalidad educativa hace mucho tiempo nos venimos haciendo cargo de las personas jóvenes y adultas que no han finalizado sus estudios por distintas razones y que han interrumpido sus trayectorias educativas, pero además todos ellos hacen que nuestras aulas tengan una gran diversidad: de género, etaria y marcada con la existencia y coexistencia de los pueblos originarios y de la población extranjera”, señaló Verónica Vergara.

Asimismo, explicó que entre 2019-2020 “hicimos vínculo con la Universidad de Chile y recogiendo esas experiencias podemos decir que ahora tenemos modelos, hemos identificado dimensiones, componentes, enfoques que hacen sostener finalmente lo que vamos a dar a conocer como Sistema de Alerta y Acompañamiento Temprano para la EPJA”.

La coordinadora del Mineduc también anunció que este año 2021 implementarán el Sistema de Alerta Temprana en 239 establecimientos de las modalidades educativas CEIA y de tercera jornada.

Como principales desafíos, durante el conversatorio se abordó el tema de la sistematización de la información respecto del abandono escolar, la integración de las comunidades educativas, resignificar la Pedagogía EPJA, visibilizar la modalidad educativa, diversificar la modalidad (integrando oficios, talleres, encuentros culturales) y, sobre todo, mejorar la asignación de recursos.

“Yo creo que es necesario cambiar la modalidad de subvención por la modalidad de matrícula. No podemos seguir con un sistema donde se asume que las características del estudiante en la educación para jóvenes y adultos son las mismas del sistema regular. Son estudiantes que por razones diversas no pueden asistir regularmente a clases y la subvención por asistencia no aporta en eso”, aseveró el director José Ramos.

Finalmente, como conclusión, el profesional del Núcleo de Convivencia, Ciudadanía y Género del Centro de Estudios Saberes Docentes, Jorge Figueroa, dijo que “ambas experiencias y lo que hemos ido comprendiendo hoy día, nos dejan algunos desafíos claves, que tienen que ver con la inclusión y con romper esta desigualdad en nuestro sistema educativo. Desde ahí lo compartido en términos de experiencia le plantea desafíos propios a los establecimientos, usar el SAT como herramienta y poder ir generando mejoras a partir de la evaluación de ese proceso”.

Sin embargo, el profesional puntualizó que a raíz de estos proyectos “también hay desafíos para la academia y con las políticas públicas, de dejar de mirar esta modalidad desde la perspectiva más compensatoria y empezar a mirarla como espacios de experimentación e innovación pedagógica. Lo que hemos visto de ambas experiencias realmente es un espacio de innovación donde hay profesionales que se atreven a apostar, innovar y transformar desde sus acciones, a comprometerse. Eso además de traer el desarrollo profesional, trae consigo justicia social”.