La importancia de fortalecer el ámbito de la docencia universitaria

El desafío que representa la formación de estudiantes universitarios/as, conlleva a reflexionar sobre cuáles son aquellas capacidades y habilidades idóneas para el desarrollo de una docencia universitaria que sea consistente con el tipo de profesionales y ciudadanos/as que demanda y precisa la sociedad para el siglo XXI.

Considerando los aspectos políticos, culturales y sociales donde se inserta esta formación, se requiere el desarrollo de competencias específicas que puedan brindar oportunidades de aprendizaje relevantes y significativos para todos y todas bajo los principios de equidad e inclusión que impulsa la Universidad de Chile.

Es en ese contexto, que en un esfuerzo colaborativo entre el Departamento de Postgrado y Postítulo de la Vicerrectoría de Asuntos Académicos y el Centro de Estudios Saberes Docentes, de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Casa de Bello se desarrolló el curso “Herramientas introductorias para el desarrollo de la docencia universitaria” que fue ofrecido a estudiantes de todos los programas de doctorado de la universidad.

“Las temáticas se centraron en ámbitos claves para el desarrollo de capacidades docentes de base, que contemplaron algunos enfoques teóricos sobre el aprendizaje en contextos universitarios, los roles que juega quien es responsable de la enseñanza y los componentes esenciales para el diseño de procesos de formación centrados en la actividad de quienes aprenden”, señaló Ximena Gutiérrez, Coordinadora Académica del curso.

El objetivo del proceso formativo radicó precisamente en fortalecer capacidades docentes en distintos ámbitos, las que favorecerán la inserción profesional de los futuros graduados y graduadas, por lo que, al finalizar este curso, “podemos concluir con altos grados de seguridad que la mayoría las /los estudiantes, mostraron evidencias de haber logrado un excelente desempeño con base en las competencias propuestas. Además,  presentaron un alto grado de interés en las experiencias de aprendizaje desarrolladas,  poniendo de relieve la enorme necesidad de conocer y desplegar habilidades para abordar las tareas de la docencia destacando el protagonismo de quienes aprenden, el respeto a la diversidad, en sentidos amplios del concepto, la necesidad de mejorar la interacción pedagógica y los procesos evaluativos, así como la comunicación efectiva, características que promueven la apertura de quienes buscan en las aulas universitarias ser más que meros receptores de conocimiento, sino también creadores colectivos de aprendizaje significativo”, añadió la profesora Gutiérrez.

Al respecto, la Dra. Alicia Salomone, directora del Departamento de Postgrado y Postítulo, dijo que “pensamos que este tipo de herramientas son importantes para insertarse en el mercado laboral y el Centro Saberes Docentes ha desarrollado una gran experticia en el campo de la formación de los docentes, entonces quisimos contar con este equipo de excelencia para formar a nuestros estudiantes. Cubrimos ampliamente todas las vacantes del curso, el que despertó mucho interés entre los estudiantes doctorales y sabemos que ellos estuvieron muy contentos, participaron activamente en las clases y aprovecharon esta instancia formativa que les va a servir mucho para su futuro laboral”.

A través de este curso, los y las estudiantes lograron adquirir conocimientos teóricos y prácticos acerca del proceso de enseñanza-aprendizaje en el nivel universitario, así como sobre el rol docente y el diseño de la enseñanza.

“Esta iniciativa forma parte de un programa de formación transversal que ofrecemos a los estudiantes de posgrado para complementar los saberes que ellos adquieren en su respectivo programa y tiene que ver con sus disciplinas, en este caso y como pasa con el programa de herramientas para la docencia, se apunta justamente al desarrollo de competencias transversales enfocadas en el futuro profesional, en donde además los estudiantes tienen la oportunidad de interactuar con compañeros y compañeras de otros programas, de otras facultades, de distintas disciplinas, aprendiendo los rubros de los otros”, agregó Salomone.

Al concluir el curso, los y las estudiantes optaron a una certificación emitida por Saberes Docentes y el Departamento de Postgrado y Postítulo de la Universidad de Chile, pero lo que sin duda generó expectativa fue la retroalimentación de los y las participantes una vez que se desarrollaron los tres módulos y se compartieron las valiosas experiencias individuales.

“Me inscribí a este curso porque, como estudiante de doctorado y probable futura docente, quería entender de manera más profunda cuáles son los desafíos para una enseñanza contemporánea. Mi experiencia como estudiante, tanto en Italia como en Chile, ha sido de un modelo clásico de enseñanza basado sobre clases magistrales, que en todo caso sigo valorando. En este curso aprendí cómo la didáctica tiene muchos modelos diferentes a seguir y pude poner en discusión el modelo que tenía interiorizado”, advirtió Mariagrazia Muscatello, curadora de arte, doctoranda en Filosofía mención Arte en la Universidad de Chile.

No muy distinta fue la experiencia de Pablo Dufflocq, Médico Veterinario y estudiante de doctorado en Ciencias Silvoagropecuarias y Veterinarias de la Universidad de Chile: “Teniendo en cuenta que la investigación está muy ligada a la docencia de acuerdo al sistema educativo chileno, la necesidad de contar con herramientas y desarrollo de competencias que permitan entregar información y conocimiento es fundamental, más allá de las competencias técnicas de mi quehacer profesional. En tercer lugar, debo destacar que la diversidad de alumnos desde distintas profesiones, ayudó un montón a ampliar ideas y puntos de vista sobre un mismo tema, lo cual considero muy positivo y que a mi parecer aportó de gran manera al desarrollo del curso. Finalmente, me gustaría continuar desarrollando competencias sobre docencia universitaria, quizás tocando más en profundidad temas como la comunicación efectiva o estrategias de evaluación”.

Ambos participantes no escatimaron en palabras a la hora de elogiar a las y los  académicos/as del Centro de Estudios Saberes Docentes quienes estuvieron a cargo de la instancia formativa.

“Puedo destacar el profesionalismo de todo el equipo docente y su atención en explicar lo que presupone desarrollar una competencia en los diferentes campos del conocimiento, también el intercambio con otros colegas de distintas áreas con los cuales hemos podido profundizar las problemáticas más comunes de la enseñanza, como por ejemplo un plan de didáctica coherente y centrado sobre las exigencias de los alumnos, que fomente la adquisición de herramientas profesionales. En el campo de las humanidades y del arte, que es de mi pertenencia, la adquisición de competencias es algo más relacionado a una esfera ética y de desarrollo del pensamiento crítico, no teniendo de manera clara una salida laboral específica o práctica, sin embargo, esta transversalidad permite poder utilizar mayores recursos creativos para la transmisión del conocimiento potenciando habilidades blandas”, señaló Mariagrazia Muscatello.

En tanto, Pablo Dufflocq agregó que “la experiencia de haber realizado este curso fue muy provechosa para aterrizar varias ideas previas sobre este tema. El cuerpo docente a cargo siempre tuvo excelente disposición para responder dudas y dictar las clases, lo cual (considerando el contexto de pandemia) se agradece un montón. De todas formas, recomiendo totalmente este curso a personas interesadas en postular a cargos de docencia, es nuestro deber adquirir las competencias necesarias para poder desarrollar correctamente esta actividad”.

La conformidad con que las y los participantes catalogaron el proceso formativo, que comenzó a inicios de agosto y finalizó en octubre, guarda directa relación con el objetivo planteado de fortalecer capacidades docentes en distintos ámbitos, apoyando la inserción profesional de los graduados y graduadas.

“Quienes aportamos a la explicitación de relevantes ideas y a la co-construcción de capacidades para la docencia en este grupo de estudiantes de postgrado, resultados que se proyectan como evidencias prometedoras en la labor de las/los futuros docentes para la Universidad y otras instituciones, podemos concluir que estamos tremendamente gratos con la participación y aportes de estos/as cien estudiantes que asumieron la formación con mucha responsabilidad, interés y compromiso”, concluyó Ximena Gutiérrez.

Simón Collado, periodista.